(Lyon, Francia, 1972)
"Me gusta buscar lugares escondidos, que no sólo se revelan al paseante apasionado e intentar representar la belleza y la serenidad de estos paisajes."
Observar la naturaleza bajo sus distintas formas, del paisaje panorámico hasta los sotobosques y arroyos, es una gran fuente de inspiración que me agrada. Me gusta buscar lugares escondidos, que no sólo se revelan al paseante apasionado e intentar representar la belleza y la serenidad de estos paisajes. Gracias a la espontaneidad y al poder expresivo de la pintura, intento recoger la esencia del tema: el centelleo de la luz y los contrastes de vivas tonalidades. Pretendo pedir prestado la intensidad de los valores coloreados y volverlos muy estimulantes devolviéndoles la realidad de una visión hecha de estallidos de luz. La exaltación de la paleta y los contrastes definiendo el color como valor de expresión más que de representación. A menudo la composición tratada en diagonal tiende a ilustrar una dinámica viva del paisaje; no se aborda de manera frontal sino de manera a volverlo original. Este ritmo rebuscado que se encuentra a menudo en puntos de vista fotográficos permite también tratar temas urbanos como los tejado de París. Trabajar las cualidades expresivas de la ejecución de distintas maneras me interesa igualmente (mediante largos aplastamientos de pintura untuosa o efectos de salpicaduras de pintura más liquida).